PREPARACIÓN Y CONVERSIÓN
5 Nuevos mensajes del Cielo dados a la Sierva de los Sagrados Corazones de Jesús y de María sobre:
• El Mundo
• Cómo evitar o aminorar la Tercera Guerra Mundial
• El aborto en México
• El Triunfo del Inmaculado Corazón de María
Miércoles 27/NOV, 20 Hrs. por CISNE Radio & TV en YouTube:
https://www.youtube.com/watch?v=VofLBqfMpH8
“En la Voluntad de Dios ¡siempre!”
Guía de MIL AVE MARÍAS (conforme a la DIVINA VOLUNTAD):
JORNADA DE ORACIÓN EN LA VOLUNTAD DIVINA EN RESPUESTA AL
PEDIDO DE NUESTRA MADRE SANTÍSIMA A LA SIERVA DE LOS
SAGRADOS CORAZONES DE JESÚS Y MARÍA.
Programa de oración
(+) Por la señal…
VEN ESPÍRITU CREADOR
Ven Espíritu Santo Creador,
a visitar nuestro corazón,
y llena con tu gracia viva y celestial,
nuestras almas, que tú creaste por amor.
Tú, que eres llamado el gran consolador,
don del Dios altísimo y Señor,
eres vertiente viva, fuego,
que es la caridad y también espiritual y divina unción.
En cada sacramento te nos das,
dedo de la mano paternal,
eres tú la promesa que el Padre nos dio;
con tu palabra enriqueces hoy nuestro cantar.
Nuestros sentidos has de iluminar,
los corazones inflamarás
y nuestro cuerpo frente a toda tentación,
con tu fuerza constante ven a reafirmar.
Aparta de nosotros la opresión
tu paz danos pronto, sin tardar;
y, siendo tú nuestro buen guía y conductor,
evitemos así toda sombra de mal.
Concédenos al Padre conocer
a Jesús, su Hijo comprender,
y a ti, Espíritu que procedes de ambos por amor,
te creemos con sóliday ardiente fe.
Al Padre demos gloria, pues es Dios,
a su Hijo que resucitó,
y también al Espíritu Consolador,
por todos los siglos de los siglos, honor.
Amén
Acto de contrición.
Oración:
Me sumerjo en la Divina Voluntad y mientras medito la Pasión de Jesús en cada Ave
María, las multiplico hasta el infinito para darle a nuestra Señora, todas las Aves Marías
meditadas que Ella ha pedido. Me uno a todas las almas para elevar esta oración en su
Divina Voluntad y sea perfecta ante Dios y derrame en todos los bienes de su Reino.
PRIMERAS MIL AVES MARÍAS
meditadas con las 24 horas de la Pasión
1era Hora Jesús se despide de su Madre
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Abba, extiende tu Reino
2. Jesús se separa de su Madre Santísima y se encamina hacia el Cenáculo
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Soberana Reina, con tu imperio divino abate mi querer, a fin de que surja
en mí el alba de la Divina Voluntad.
3. La Cena Legal
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Reina Poderosa, domina mi voluntad y conviértela en Voluntad Divina.
4. La Cena Eucarística
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Mamá Celestial, tómame entre tus brazos y escribe en mi corazón: FIAT,
FIAT, FIAT.
5. Primera hora de la agonía en el Huerto de Getsemaní
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Reina Triunfante, roba mi voluntad y dame la Divina.
6. Segunda hora de agonía en el Huerto de Getsemaní
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Reina del cielo, hazme poseer por la Divina Voluntad.
7. Tercera hora de agonía en el Huerto de Getsemaní
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Mamá Santa, enciérrame en tu Corazón a fin de que yo aprenda de Ti a
vivir de Voluntad Divina.
8. La captura de Jesús
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Mamá Celestial, derrama tus lágrimas en mi alma para que ellas curen
las heridas producidas por mi voluntad.
Oración dada a la Pequeña servidora:
Mamá mía, Mamá María reconozco que puedes detener el mundo para que no haya
más muertes ni guerras, deseo que el mundo sea donde reine la voluntad de Papá Dios
y se llene la tierra de paz como en el Cielo.
Salmo 2:1-12
¿Por qué se amotinan las naciones y los pueblos conspiran en vano?
Los reyes de la tierra se sublevan, los príncipes a una se alían en contra de Yahvé y su
Ungido:
'Rompamos sus cadenas, sacudámonos sus riendas'.
El que habita en el cielo se ríe, Yahvé se burla de ellos.
Después les habla irritado, los espanta lleno de cólera:
'Yo mismo he consagrado a mi rey, en Sión, mi monte santo'.
Haré público el decreto de Yahvé: Él me ha dicho: 'Tú eres mi hijo, hoy te he
engendrado.
Si me lo pides, te daré en herencia las naciones, en propiedad la inmensidad de la
tierra;
los machacarás con cetro de hierro, los pulverizarás como vasija de barro'.
Por eso, reyes, pensadlo bien, aprended la lección, gobernantes de la tierra.
Servid a Yahvé con temor,
temblando besad sus pies; no sea que se irrite y os perdáis, pues su cólera se inflama
en un instante. ¡Dichoso quien se acoge a él!
Oración:
Trinidad Santa un solo Dios, en estas primeras mil Aves Marías meditadas con los
Bienes Divinos de las primeras ocho horas de la Pasión, en nombre de todas las almas
quiero amarte, adorarte, agradecerte, alabarte, glorificarte y pedirte que muy pronto
se extienda el completo triunfo de la Divina Voluntad en mi y en todas las almas. Amén.
SEGUNDAS MIL AVES MARÍAS
Oración:
Me sumerjo en la Divina Voluntad y mientras medito la Pasión de Jesús en cada Ave
María, las multiplico hasta el infinito para darle a nuestra Señora, todas las Aves Marías
meditadas que Ella ha pedido. Me uno a todas las almas para elevar esta oración en su
Divina Voluntad y sea perfecta ante Dios y haga caer en todos los bienes de su Reino.
9. Jesús, atado, es hecho caer en el torrente Cedrón
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Reina de la Paz, obténme el dulce beso de paz de la Voluntad Divina.
10. Jesús es presentado a Anás
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: ¡Mamá Celestial, haz surgir el alba y la aurora de la Divina Voluntad en mi
alma!
11. Jesús en casa de Caifás
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Reina Poderosa, rapta mi corazón para encerrarlo en la Voluntad de Dios.
12. Jesús en medio de los soldados
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Mamá Reina, enciérrame en el Sagrado Templo de la Voluntad de Dios.
13. Jesús en prisión
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Reina poderosa, concédeme las armas para ganar la batalla a mi
voluntad.
14. Jesús de nuevo ante Caifás y después es llevado a Pilatos
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Emperatriz Celestial, trae el beso de la Voluntad de Dios a mi alma.
15. Jesús ante Pilatos. Pilatos lo envía a Herodes
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Reina Poderosa, pronuncia tu FIAT para que viva en mí la Voluntad de
Dios.
16. Jesús de nuevo ante Pilatos. Es pospuesto a Barrabás. Jesús es flagelado
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Mamá de Jesús, sé también mi Mamá y guíame por el camino de la Divina
Voluntad.
Oración dada a la Pequeña servidora:
Mamá mía, Mamá María reconozco que puedes detener el mundo para que no haya
más muertes ni guerras, deseo que el mundo sea donde reine la voluntad de Papá Dios
y se llene la tierra de paz como en el Cielo.
SALMO 3
Salmo. De David. Cuando huía de su hijo Absalón.
Yahvé, ¡cuántos son mis adversarios, cuántos los que se alzan contra mí!
¡Cuántos los que dicen de mí: 'que no espere salvación en Dios'! Pero tú, Yahvé, mi escudo protector, mi orgullo, el que levanta mi frente.
Invoco a gritos a Yahvé, y me responde desde su monte santo.
Me acuesto y me duermo, me despierto: Yahvé me sostiene.
No temo a esas gentes que a millares se apuestan en torno contra mí.
¡Levántate, Yahvé! ¡Sálvame, Dios mío! Tú golpeas el rostro de mi enemigo, tú rompes
los dientes de los malvados.
En Yahvé está la salvación, baje sobre tu pueblo tu bendición.
Oración:
Trinidad Santa un solo Dios, en estas segundas mil Aves Marías meditadas con los
Bienes Divinos de las segundas ocho horas de la Pasión, en nombre de todas las almas
quiero amarte, adorarte, agradecerte, alabarte, glorificarte y pedirte que muy pronto se extienda el completo triunfo de la Divina Voluntad en mi y en todas las almas. Amén.
TERCERAS MIL AVES MARÍAS
Oración:
Me sumerjo en la Divina Voluntad y mientras medito la Pasión de Jesús en cada Ave
María, las multiplico hasta el infinito para darle a nuestra Señora, todas las Aves Marías
meditadas que Ella ha pedido. Me uno a todas las almas para elevar esta oración en su
Divina Voluntad y sea perfecta ante Dios y haga caer en todos los bienes de su Reino.
17. Jesús es Coronado de espinas “Ecce Homo”. Jesús es condenado a muerte
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Mamá mía, graba en mi corazón el Santísimo Nombre de Jesús, para que
El me dé la gracia de vivir siempre de Voluntad Divina.
18. Jesús abraza la Cruz camino al calvario. Jesús es despojado de sus vestiduras
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Mamá Celeste, cúbreme con tu manto y enciérrame en la Divina
Voluntad.
19. La Crucifixión de Jesús. Jesús clavado en la Cruz
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Mamá mía, encierra al pequeño Jesús en mi corazón para que ahí El
forme el reino de la Divina Voluntad.
20. Primera hora de agonía en la Cruz. La Primera Palabra
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Jesús, María y José, haced que viva con Vosotros en el Reino de la Divina
Voluntad.
21. Segunda hora de agonía en la Cruz. Segunda Palabra, Tercera Palabra y
Cuarta Palabra
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Mamá Santa, haz que yo pierda para siempre mi voluntad para vivir
únicamente en el Divino Querer.
22. Tercera hora de agonía en la Cruz. Quinta Palabra, Sexta Palabra y Séptima
Palabra
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Mamá santa, ven a mi alma y obra el milagro de convertir mi voluntad
humana en Voluntad Divina.
23. Jesús muerto, traspasado por una lanza. El Descendimiento de la Cruz
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Mamá divina, tus palabras y las de Jesús desciendan a mi corazón y
formen en mí el Reino del Divino Querer.
24. La Sepultura de Jesús
Padre Nuestro
Rezo de 125 Aves Marías
Gloria
Jesús, José y María: no soy digno de ustedes pero los necesito.
Jaculatoria: Las llagas de Jesús y los dolores de mi Mamá me den la gracia de hacer
resurgir mi voluntad en la Voluntad de Dios.
Oración dada a la Pequeña servidora:
Mamá mía, Mamá María reconozco que puedes detener el mundo para que no haya
más muertes ni guerras, deseo que el mundo sea donde reine la voluntad de Papá Dios
y se llene la tierra de paz como en el Cielo.
Salmo 4
Del maestro de coro. Para instrumentos de cuerda. Salmo. De David.
Respóndeme cuando te llamo, Dios testigo de mi inocencia; tú, que en el apuro me
abres salidas, tenme piedad y escucha mi oración.
¿Hasta dónde, hombres, insultaréis a mi gloria, amaréis la vanidad y andaréis tras la
mentira?
Sabed que Yahvé me distingue con su amor, Yahvé me escucha cuando le llamo.
Temblad y no pequéis, reflexionad en el lecho y callad.
Ofreced sacrificios justos y confiad en Yahvé.
Muchos dicen: '¿Quién nos hará ver la dicha?'. ¡Haz brillar sobre nosotros la luz de tu
rostro! Yahvé,
me has dado más alegría interior que cuando ellos abundan en trigo y en mosto.
9 En paz me acuesto y en seguida me duermo, pues tu solo, Yahvé, me haces vivir
tranquilo.
Oración:
Trinidad Santa un solo Dios, en estas terceras mil Aves Marías meditadas con los
Bienes Divinos de las terceras ocho horas de la Pasión, en nombre de todas las almas
quiero amarte, adorarte, agradecerte, alabarte, glorificarte y pedirte que muy pronto
se extienda el completo triunfo de la Divina Voluntad en mi y en todas las almas. Amén.
Letanías Lauretanas
CONSAGRACIÓN A LA DIVINA VOLUNTAD
Oh Voluntad Divina y Adorable, heme aquí ante la inmensidad de tu Luz, para que tu
Eterna Bondad me abra las puertas y me haga entrar en Ella, para formar mi vida toda
en Ti, Voluntad Divina. Así pues, postrado ante tu Luz, yo, el más pequeño entre todas
las criaturas, entro, oh Adorable Voluntad, en el pequeño grupo de los hijos de tu
“FIAT” Supremo.
Postrado en mi nada, invoco y suplico a tu Luz que me revista y eclipse todo lo que no
Te pertenece, de modo que ya no mire, ni comprenda, ni viva, sino en Ti, Voluntad
Divina. Esta será, pues, mi vida, el centro de mi inteligencia, la raptora de mi corazón y
de todo mi ser. En mi corazón no quiero que tenga más vida el querer humano; lo
arrojaré afuera de mí y así formaré el nuevo Edén de paz, de felicidad y de amor. Con
Ella seré siempre feliz, y tendré una fuerza única y una Santidad que todo santifica y
conduce a Dios.
Aquí postrado, invoco la ayuda de la Sacrosanta Trinidad para que me admita a vivir en
el claustro de la Divina Voluntad, y así regrese en mí aquel Orden primero de la
Creación, tal y como fue creada la criatura.
Madre del Cielo, Soberana y Reina del “FIAT” Divino, tómame de la mano e
introdúceme en la Luz del Divino Querer. Tú serás mi guía, mi dulcísima Madre, y me
enseñarás a vivir y a mantenerme en el orden y en el recinto de la Divina Voluntad.
Soberana Celestial, a tu Corazón confío todo mi ser. Tú me enseñarás la Doctrina de
la Divina Voluntad y yo pondré toda mi atención en escucharte. Extenderás tu manto sobre mí, para que la serpiente infernal no se atreva a penetrar en este sagrado Edén
para seducirme y hacerme caer en el laberinto del querer humano.
Corazón de mi Sumo Bien Jesús, Tú me darás tus llamas para que me incendien, me
consuman y me alimenten, para formar en mí la Vida del Supremo Querer. San José, tú
serás mi protector, el custodio de mi corazón, y tendrás las llaves de mi querer en tus
manos. Celosamente custodiarás mi corazón y nunca más me lo darás, para estar así
seguro de no salirme jamás de la Voluntad de Dios.
Ángel custodio mío, guárdame, defiéndeme, ayúdame en todo, para que mi vida sea
llamada que atraiga a todos al Reino de la Divina Voluntad. Corte del Cielo toda, dame
tu ayuda, y yo viviré para siempre en la Voluntad Divina.
Amén
CONSAGRACIÓN A JESÚS REY DEL UNIVERSO
Oh Jesús! Rey de reyes, Dios de Bondad, Dios de Amor y de Misericordia; yo adoro,
amo, doy gracias, glorifico tu Santísima Voluntad que emana de tu Omnipotencia, que
es guiada por tu Sabiduría y acompañada por tu Bondad y tu Amor. Por donde quiera y
en todo momento, sea en la alegría que en el dolor, tu Santísima Voluntad, tu Divino
Amor, sean la estrella que admiro, la ley que me gobierna, el aire que respiro, el palpitar
de mi corazón, la sustancia, o mejor, la vida de mi vida.
Con esta finalidad, uno todas mis oraciones y mis acciones a las tuyas, toda mi vida a
la tuya, y también a la de la Virgen Santísima Madre tuya y Madre mía, a la de San José y a
la de todos los Elegidos que ha habido, que hay y que vendrán, con todo el bien pasado,
presente y futuro, real y posible en el cielo y en la tierra. Yo me consagro y me entrego
totalmente, cuanto tengo, cuanto soy, cuanto me pertenece, a quienes quiero, mi vida,
mi muerte, mi eternidad, todo lo que has creado y lo que crearás, a tu Suprema
Voluntad, a tu infinito amor, y te pido, ¡oh Sabiduría Infinita!, que me inscribas con
caracteres imborrables en tu Corazón Adorable, cual ardiente y celoso hijo de tu Divina
Voluntad, de tu purísimo amor.
Yo hago este ofrecimiento y entrega en la Potencia del Padre, en la Sabiduría del Hijo y
en la Virtud del Espíritu Santo, a nombre mío y a nombre de todas las criaturas para
obtener que venga y que se extienda el Reino de la Divina Voluntad y de tu Divino Amor,
sobre la tierra. ¡Ah! Haz, ¡oh Señor mío!, que de cada labio y de cada corazón, como de
un altar sagrado, se eleve continuamente al Cielo la oración que tú mismo, el primero de todos, elevaste al Padre: «¡Venga tu Reino, hágase tu Voluntad como en el cielo, así
en la tierra!»
Amén.
Etiquetas: aborto, gran aviso, guerra mundial, purificación, triunfo del Inmaculado Corazón
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